Me aborrecen la aburrida rutina de la existencia. Yo imploro de exaltación mental.
Arthur Conan Doyle
Me temo que ningún hombre, ninguna bestia o el mal, hermano.
Una poderosa memoria, concentración, imaginación y una fuerte voluntad.
Y seguiré naufragando en mares ajenos hasta naufragar en mi propio mar
Los seres humanos no están condenados, por su constitución biológica, a aniquilarse o a estar a la merced de un destino cruel, infligido por ellos mismos