...para mí la vida no comenzó hasta el día en que te vi.
Stendhal
La virtud resplandece en las desgracias.
El recuerdo conserva una antigua retórica, se eleva como un árbol o una columna dórica, habitualmente duerme dentro de nuestros sueños y somos en secreto sus exclusivos dueños.
Un aguacero. Se agarran a las hierbas los gorriones.
No juzgar a los hombres por sus actos. Condenarlos.