Aquello que nos promete el paraíso en la tierra nunca produjo nada, sino un infierno.
Karl Popper
Vivir sin amar no es, propiamente, vivir.
Por fiel que uno quiera ser, nunca deja de traicionar la singularidad del otro a quien se dirige.
Nadie puede ser perfectamente libre hasta que todos lo sean.
Nadie podrá decir que un nido calentito y dichoso dará de sí muy grandes personas. La inadaptación a lo imperfecto es lo que mejora al hombre.