El odio tiene su cristalización; en cuanto uno puede esperar vengarse, vuelve a empezar a odiar
Stendhal
El que quiere ser opositor y el que dice ser un revolucionario, todos entran y salen de esta ciudad Valiente, que en definitiva es Bendita, por su gente. Ciudad Bendita.
El amor hace que todo lo amargo se le haga a uno dulce y sabroso
La arrogancia es un reino sin corona
Todo progreso es precaria, y la solución de un problema nos pone cara a cara con otro problema.