Ríe cuando estés triste, llorar es demasiado fácil.
Marilyn Monroe
Y en el Reino de los judíos, durante el reinado sacerdotal de Dios, los diezmos y ofrendas constituían todo el ingreso público.
¡Cuan triste es, Dios mío, la vida sin ti!
Algunos escritores solo han nacido para ayudar a otro escritor a escribir una frase. Pero un escritor no puede derivar de un clásico que le precede.
Cuando llegues a la última página, cierra el libro.