Alice Englert: No es lo que se ve en pantalla...

Derrochando la bolsa y la vida la fui poco a poco dando por perdida.

Creo que no fue una sorpresa que terminé como actor, y fue nada más que una decepción.

Cuando los esposos y padres se van, sus esposas e hijas tienden a valorarse a sí mismos menos como resultado.

El corazón no habla, más adivina aunque calla.