Cada deporte tiene su templo, su catedral.
Thomas Friedman
Nosotros, los humanos carecen de imaginación, hasta el punto de ni siquiera saber lo que las cosas importantes del futuro se verá así.
Los ladrillos saben esperar.
Ninguno de nosotros es responsable de la tez de su piel. Este hecho de la naturaleza no ofrece ninguna pista sobre el carácter o la calidad de la persona debajo.
Uno busca que el ser querido sea del todo feliz, o, si eso no puede ser, que sea totalmente miserable.