Mi manera de comprometerme fue darme a la fuga.
Joaquín Sabina
El santo perfecto de Dios es el castrado perfecto.
Siempre ha sido un gran valor de supervivencia para las personas que creen que pertenecen a una tribu superior. Eso es solo en las relaciones humanas.
Yo estoy completamente segura de que la mayoría de la humanidad no cuida su fortuna espiritual
No me propuse ser famosa, y si hubiera querido que me hubiera ido de 'Gran Hermano'.