Uno se da cuenta de que es desgraciado y miserable pobre y está ciego y desnudo, y con rostro de fantasma dolorido y amargado camina temblando por la pesadilla de la vida
Jack Kerouac
Yo ya no podré estar aquí. Voy hacia delante a cada instante. No hay más remedio, es el flujo del tiempo que no puede detenerse. Seguiré.
Cuando hay calidad, la gilada pierde peso...
Yo nunca saber vender a mí mismo como un símbolo sexual. No es así como yo estoy programado.
Todo hombre lo bastante inteligente y generoso para aportar a la empresa su esfuerzo, por pequeño e insignificante que sea, obtendrá de la lucha misma un noble goce que no estará dispuesto a vender...