Me gusta sentirme como un buey al final del día. Me gusta trabajar duro.
Rachael Ray
El mundo, ahora y antes, está basado en una competición a vida o muerte; lo que se disputaba en la guerra era qué niños, si los alemanes o los aliados, debían morir de hambre y de miseria
En el naufragio de la embriaguez, puede observarse que lo único que sobrenada es el amor propio.
Ha llegado la hora de la mujer que comparte una causa pública y ha muerto la hora de la mujer como valor inerte y numérico dentro de la sociedad
Cuesta mucho trabajo que la libertad vuelva a la franca unidad del instinto