¿Y no basta con abrir los ojos y mirar para convencernos de que la realidad es, en realidad, el más auténtico de los milagros?
Oliverio Girondo
Nadie habla sino de su propio síntoma
La Universidad saca a la luz todas las capacidades, incluida la incapacidad.
A toda esa gente a quien se le ha muerto un hijo tienes ganas de decirles: adelante. Culpaos.
Cuando nos vemos al borde del abismo y parece que Dios nos ha abandonado, ya no vacilamos en esperar de él un milagro.