Para gobernar a los hombres hay que saberse aprovechar de sus vicios, más bien que de sus virtudes.
Marlene Dietrich
La ilusión es un fantasía dolorosa.
Nadie tiene la memoria suficiente para mentir siempre con éxito.
Nos miramos todos con el odio característico con que nos miramos los españoles.
Un montón de epítetos es alabanza pobres: la alabanza está en los hechos, y en la manera de decirle a ellos.