Pierre-Augustin de Beaumarchais: ¡Una ópera! ¡Vaya, por Dios...
¡Una ópera! ¡Vaya, por Dios! ¡Será, como de costumbre, un drama semi serio, un largo, melancólico y pesado estrambote poético! ¡Bárbaro gusto! ¡Siglo corrompido!
Pierre-Augustin de Beaumarchais