Morir mañana es tan bueno como morir cualquier otro día.
Paulo Coelho
El hambre espía en la casa de los pobres, pero si la habitan personas trabajadoras, no se atreve a entrar.
Un cínico es un hombre que, en cuando huele flores, busca un ataúd alrededor.
Dios no habla, pero todo habla de Dios.
Piensa que cada día puede ser el último.