Con frecuencia, algunos buscan la felicidad como se buscan los lentes cuando se tienen sobre la nariz.
Gustavo Dorz
La vejez no mejora el corazón: lo endurece.
Al burro muerto, cebada al rabo.
A la vejez, viruelas.
El vicio rara vez se insinuó oponiéndose a la honradez; casi siempre toma el disfraz de ésta.