Fritz Haber: La exposición a una baja conc...

Incluso ella comprendía que no bastaba con aquello, que cada minuto que Penélope y Julián pasaban juntos les unía más. Hace tiempo que el aya había aprendido a reconocer en sus miradas el desafÃ...

Ya se acabaron los tiempos en que nuestros estudiantes hablaban o protestaban por una lenteja de más o de menos en su comida.

A propósito, ¿como anduvo eso en Callejón Vuelva Otra Vez? -dijo, estirándose y respirando profundamente.

son más difíciles de ahuyentar los fantasmas que han estado en nuestras habitaciones.