Conde de Romanones: Los discursos sin contradictor...
Los discursos sin contradictor en realidad no son discursos sino sermones; sermonear es más fácil que discutir, porque es sólo dogmatizar.
Conde de Romanones
Los discursos sin contradictor en realidad no son discursos sino sermones; sermonear es más fácil que discutir, porque es sólo dogmatizar.
Conde de Romanones