Juvenal: ¿Quién vigilará a los vigil...

Si quieres enemigos ya los tienes,
pero si socios buscas ¿cuándo vienes
a repartir conmigo la poesía?

Qué absurdo encerrarse en un horrible barco que las grupas monstruosas de las olas trataban de invadir, mientras un viento aciago derribaba mástiles y rasgaba velas hasta convertirlas en largos colg...

No condenéis a los mentirosos. En el fondo del alma de todo aquel que miente no hay quizá más que un instinto confuso de estética y de perfección.

?los hombres saben mejor que las mujeres, saben recio como cochino salado, como jamón, da gusto comer un buen macho, las mujeres saben dulce como quien come flores y te dejan él estomago flojo como ...