Julio Cortázar: Demasiado tarde, siempre, porq...


Demasiado tarde, siempre, porque aunque hiciéramos tantas veces el amor la felicidad tenía que ser otra cosa, algo quizá más triste que esta paz y este placer, un aire como de unicornio o isla, una caída interminable en la inmovilidad

Julio Cortázar


Temáticas Relacionadas