El ceder sin convicción no habla en favor del entendimiento de ninguno de los dos.
Jane Austen
pregunté al portero si estaban permitidas las visitas de amigas de medianoche, y él me dio su respuesta sabia: ?Está prohibido, señor, pero yo no veo lo que no debo.
Luchamos por aquellas tierras para no perderlas. Lo perdimos casi todo. [?] La nación americana es demasiado poderosa para nosotros. Cuando habíamos de luchar durante pocos días, nos sentíamos fre...
los sueños correctos para un hombre en peligro eran sueños de peligro y que lo demás era sólo la llamada de la languidez y de la muerte.
Vuelvo a ser un loco para sobrevivir a la locura de la vida