Roland comprende que tiene razón. Si la búsqueda de la Torre Oscura ha de finalizar allí, en la Colina de Jericó, traicionados por uno de los suyos y abatidos por lo que quedaba del bárbaro ejército de John Farson, entonces que acabara por todo lo alto. brbr?¡Ea! ?grita?. ¡Ea, muy bien! ¡Los del castillo, a mí! ¡Pistoleros, a mí! ¡A mí! brbr?En cuanto a los pistoleros, Roland ?dice Cuthbert?, estoy aquí. Y somos los últimos.
Stephen King