La película habría de filmarse en las vísperas de la elección de 1960, en medio de una ferviente fiebre anticomunista producida por el triunfo de la Revolución cubana y Wayne dejó clara su posición: quería una historia que pudiera «vender el ideal estadounidense a los países amenazados por la dominación comunista» y en el film se repite varias veces la frase «soportar la opresión o rendirse
Paco Ignacio Taibo II