El pasado es la única cosa muerta cuyo aroma es dulce.
Eduard Thomas
El que revela el secreto de otros pasa por traidor; el que revela el propio secreto pasa por imbécil.
Come poco y cena menos, que la salud de todo el cuerpo se fragua en la oficina del estómago.
El problema del hombre no está en la bomba atómica, sino en su corazón.
Cuando al tirano se le puede llamar tirano el humor deja de ser necesario.