Émile Armand: La plena y entera disposición...


La plena y entera disposición del trabajo y de sus productos (es decir, la plena y entera facultad de trocar dicho producto, de cambiarlo, de alienarlo e incluso de legarlo) va acompañada de la plena facultad de posesión del medio de producción que se hace valer ya sea individualmente o por asociación. Es comprensible que existan ciertas producciones que no pueden obtenerse sin una asociación sólidamente organizada. Lo esencial que hemos de tener presente es que gracias a la posesión personal de la herramienta o de la máquina o procedimiento de producción, la unidad productora, en caso de ruptura de contrato de asociación, no se halle jamás desprovista, entregada a la arbitrariedad o sometida a las condiciones de un medio social al que le repugnase pertenecer.

Émile Armand


Temáticas Relacionadas