SIEMPRE ES BUENO SALIRSE EN LO MEJOR DE LA FIESTA
Jaime Garzón
Lewis no contestó. En lugar de eso, se dirigió el revólver a la sien, sonrió como un demente y apretó el gatillo.
Tengo la sensación de que, la noche en que miras a tu público y no te ves a ti mismo, y la noche en que el público te mira y no se ve reflejado en ti, es que todo ha terminado.
Soy un forastero en una tierra familiar.
Que yo sea yo y no otra persona, es para mí uno de mis más preciados bienes. Las heridas incurables que recibe el corazón son la contraprestación natural que las personas tienen que pagar al mundo...