Así como no existen personas pequeñas ni vidas sin importancia, tampoco existe trabajo insignificante.
Elena Bonner
No te preocupes por el mañana, porque el mañana traerá sus propias preocupaciones. A cada día le bastan sus quebraderos de cabeza.
El grado sumo del saber es contemplar el por qué.
Todo es sencillo, si lo quiero tener lo busco, el problema es que cuando lo encuentro no se si lo merezco.
Cada niño es un letrero viviente que dice: ¡Precaución!.