Solo la mano que borra puede escribir la verdad.
Eckhart de Hochheim
Nadie se hizo perverso súbitamente.
Por lo general, los hombres creen fácilmente lo que desean.
Y de veras que nunca sabes lo pomposo que va a resultar algo hasta que lo ves impreso.
La muerte llegará, al fin y al cabo la muerte tiene buena memoria y nunca se olvidó de nadie.