I CHING: Los corazones ajenos se ganan ...


Los corazones ajenos se ganan con bondad y benevolencia y no por la fuerza y la coacción. Es correcto ser bueno pero manteniendo un sentido de dignidad a fin de ser respetado por todos.
Un hombre rico y poderoso debe permanecer aparte de otros también poderosos. No debe mostrar envidia ni orgullo, por tanto, refrenar sus impulsos es alcanzar el éxito.
Éxito seguro, ya que el chillido alcanza en lo más profundo de nuestros corazones, demostrando la auténtica humildad; el exito será suyo si persevera en ese camino.


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