Rafael Alberti: Pero tú, despertando, me hund...

Pero tú, despertando, me hundiste en tus ojos.
Rafael Alberti
Más frases

Quien procede injustamente es más desgraciado que la víctima de su injusticia.

Todas las mujeres llegan a ser como sus madres; ésa es su tragedia.
En la naturaleza nada ocurre en forma aislada. Cada fenómeno afecta a otro y es, a su vez, influenciado por éste; y es generalmente el olvido de este movimiento y de ésta interacción universal lo ...

No puede uno crecer más por haber subido más alto, ni tampoco puede ser más pequeño por vivir en un lugar más bajo.