Vivir significa matar a otros; crecer, asimilarse el cadáver de muchos. Somos un cementerio ambulante donde miríadas de seres se entierran para darnos vida con su muerte.
Manuel González Prada
Las rebeldías románticas son embotadas por la experiencia: ella enfrena muchas impetuosidades falaces y da a los ideales más sólida firmeza. Las lecciones de la realidad no matan al idealista: lo ...
Mientras que la Iglesia y las religiones se basan en el engaño y la superstición, la religión de la Naturaleza se basa en la verdad y el conocimiento.
Lo que un teólogo siente como verdadero debe ser falso.
La muerte nunca es asumida. Viene.