No tuve hijos, no he transmitido a ninguna criatura el legado de nuestra miseria.
Machado de Assis
¡Cuán tenaz es la vida y cómo se aferra a uno cuando más se le odia!
Este país necesita poetas
Ustedes lo que tienen es vergüenza para con uno.
El frío anochecer de Kyoto hacía aflorar el calor del fuego. El viento, en la penumbra, gemía entre los pilares. El grillo que se posaba en la gruesa columna había desaparecido.