¿Cuáles son las fuentes de la fuerza? Mi marido y mis tres hijos, mi equipo de atención médica, y mi religión.
Geraldine Ferraro
Ningún mal puede resultar de la inhibición más pernicioso que su tolerancia.
Si practicar el sexo fuese delito, y el botones del hotel Beverly Wilshire hablase, yo ya estaría condenado a cadena perpetua.
La conciencia es un cobarde, y esos fallos no tiene la fuerza suficiente para evitar que rara vez tiene la justicia suficiente para acusarle.
Dale a tus hijos un cuchillo con sangre y un tenedor y dejar que me puse un poco de comida fresca en frente de ellos pueden comer.