La novedad es madre de la temeridad, hermana de la superstición e hija de la ligereza.
San Bernardo de Claraval
Un hombre no es desdichado a causa de la ambición, sino porque ésta lo devora.
Quizá haya enemigos de mis opiniones, pero yo mismo, si espero un rato, puedo ser también enemigo de mis opiniones.
Amor sin celos no lo dan los cielos.
Las naciones más progresistas son siempre las que navegan más y tienen más marinos.