Cuando mi estado de ánimo era alto, me pareció normal, incluso boyante. Me sentía más inteligente. Yo tenía secretos. Podía ver a Dios en un foco de luz.
Gene Tierney
Sin educación estamos en un peligro horrible y mortal de tomar a gente educada seriamente.
Necesitamos alguien que tiene el corazón, la empatía, de reconocer lo que es ser una madre adolescente, la empatía para entender lo que es ser pobre o afroamericano o gay o discapacitados o anciano...
Carecer de algunas de las cosas que uno desea es condición indispensable de la felicidad.
Ahora soy dueño de acciones de empresas en 28 países.