Colección de jose
Sin fantasÃa no existirÃan delincuentes ni poetas.
Curt Goetz¡azotadme!
¡Azotadme!
Aquà estoy,
¡azotadme!
Merezco que me azoten.
No lamà la rompiente,
la sombra de las vacas,
las espinas,
la lluvia;
con fervor,
durante años;
descalzo,
estremecido,
absorto,
iluminado.
No me postré ante el barro,
ante el misterio intacto
del polen,
de la cama,
del gusano,
del pasto;
por timidez,
por miedo,
por pudor,
por cansancio.
No adoré los pesebres,
las ventanas heridas,
los ojos de los burros,
los manzanos,
el alba;
sin restricción,
de hinojos,
entregado,
desnudo,
con los poros erectos,
con los brazos al viento,
delirante,
sombrÃo;
en comunión de espanto,
de humildad,
de ignorancia,
como hubiera deseado...
¡como hubiera deseado!
Debo confesar que nacà a una edad muy temprana.
Groucho MarxDe males a bienes dicen que se pasa fácilmente; pero de males a males, digo yo que es más frecuente.
Pedro Calderón de la BarcaA un alma se le mide por la amplitud de sus deseos, del mismo modo que se juzga de antemano una catedral por la altura de sus torres.
Gustave FlaubertEl no esperar remedio, ni desesperar de él, suele ser el remedio de los casos desesperados.
Diego de Saavedra FajardoLos reyes quieren ser absolutos; los nobles quieren ser independientes; los pueblos quieren ser felices.
Louis Emmanuel DupatyLa humanidad, partiendo de la nada y con su solo esfuerzo, ha llegado a alcanzar las más altas cotas de miseria.
Groucho MarxEl primer dÃa de la primavera es una cosa y el primer dÃa primaveral, otra diferente. Frecuentemente la diferencia entre ellas es más de un mes.
Henry Van DykeTodas las madres vienen de la misma madre, por eso, madre es la verdadera palabra de un universo.
José Luis CunhaMás de uno le debe el éxito a su primera esposa, y su segunda esposa a su éxito.
Jim BackusNo hay ninguna cosa buena que no tenga su base en la razón.
SénecaLa naturaleza se basta asà misma; por esto vence con lo menos y con lo seguro, las demasÃas de la esperanza.
DemócritoEs hermoso servir a la patria con hechos, y no es absurdo servirla con palabras.
SalustioEl problema no es saber demasiado, el problema es que los demás sepan que tú sabes demasiado.
ThrolaHasta La Muerte
En el paisaje oscuro
oigo tu voz, tu voz,
tu larga voz de espesas
caricias resbaladas,
mojadas y olorosas.
La noche me suspende
en un vuelo pausado
e, inmóvil, pone en vilo
lo que el hombre no entiende:
tu voz, tu voz querida
hundiéndome en lo ausente.
Uno cierra los ojos
(¡me da miedo mirarte!);
uno tiende las manos
-aves heridas y leves-,
y en sus raÃces siente
que tú eres y no eres.
El pensamiento está libre de impuestos.
Martin LuteroNadie puede censurar o condenar a otro, porque nadie conoce perfectamente al otro.
Thomas Browne