No está la felicidad en vivir, sino en saber vivir.
El valor nunca es mayor que cuando nace de la última necesidad.
La lengua disimula y encubre los designios.
Todo el estudio de los políticos se emplea en cubrirle el rostro a la mentira para que parezca verdad, disimulando el engaño y disfrazando los designios.
Un pequeño gusano roe el corazón a un cedro y lo derriba.
El que a muchos teme, de muchos es temido.-
El no esperar remedio, ni desesperar de él, suele ser el remedio de los casos desesperados.
Todo lo ignora quien de nada duda.
Hay que saber navegar con viento de proa.
Más reinos derribó la soberbia que la espada, más príncipes se perdieron por sí mismos que por otros
Rendirse ante la adversidad es mostrarse de su parte.
La amistad más se ha de sostener con correspondencia que con dádivas; porque con el interés se fingen, pero no se hacen las amistades.
La belleza del cuerpo es un viajero que pasa; pero la del alma es un amigo que queda.
Hay que saber navegar con viento de proa.?
In contraria ducet.
La curiosidad se atreve más contra lo que más se prohíbe.