El papel de las mujeres en el progreso de la civilización es mucho mayor que el del hombre, por lo que debería desarrollar sus aptitudes de acuerdo con su naturaleza, sin imitar a los hombres.
La inteligencia es casi inútil a aquel que no tiene más que eso.
El sentido moral es de gran importancia. Cuando desaparece de una nación, toda la estructura social va hacia el derrumbe.
Poca observación y muchas teorías llevan al error. Mucha observación y pocas teorías llevan a la verdad.
El equilibrio mental, juicio recto, valor moral, audacia, resistencia, forma de tratar al prójimo y cómo sacar el mayor bien de los contratiempos son cosas que no se aprenden en la escuela.
El hombre no ha sabido organizar un mundo para sí mismo y es un extraño en el mundo que él mismo ha creado.
Es imposible educar niños al por mayor; la escuela no puede ser el sustitutivo de la educación individual.
El tiempo físico nos es extraño, mientras el tiempo interior es nosotros mismos.
Todos los grandes hombres están dotados con la intuición. Ellos saben sin razonamiento o análisis, lo que necesitan saber.
La ciencia tiene que ser entendida en su sentido más amplio, como un método para comprender la realidad observable, y no simplemente como un instrumento para la adquisición de conocimientos especia...
La manera más eficaz de vivir es hacer todas las mañanas un plan para el día y cada noche repasar los resultados obtenidos.
Algunos de observación y mucho razonamiento llevan al error; muchas observaciones y un poco de razonamiento a la verdad.
El primer deber de la sociedad es dar a cada uno de sus miembros la posibilidad de cumplir con su destino. Cuando se vuelve incapaz de cumplir este deber debe ser transformada.
El amor tiene dos leyes: la primera, amar a los otros; la segunda, eliminar de nosotros aquello que impide a los otros amarnos.
El amor de la belleza en sus múltiples formas, es el don más noble del cerebro humano.
La religión aporta al hombre una fuerza interior, la luz espiritual y la paz inefable.
Aquellos que desean subir hasta nuestra condición humana lo permita, debe renunciar orgullo intelectual, la omnipotencia del pensamiento claro, la creencia en el poder absoluto de la lógica.
El único cemento sólido para unir a los hombres es el amor.
El ambiente de las bibliotecas, aulas y laboratorios es peligroso para los que se encierran en ellos por mucho tiempo. Nos separa de la realidad como una niebla.