Crecí en un deporte que no le permiten crecer. Siempre existía la amenaza de la competencia más joven. Así que había que mantener la imagen de la juventud.
Actuar me permite la libertad de dejar ir, para estar en el momento, de ser espontáneo. Ya no tengo miedo a perder, al fracaso.
Al ver el espectáculo es como una visita a la fuente de la juventud para que los padres y los hijos.