Mediante el fortalecimiento de la economía, ofreciendo oportunidades de empleo y satisfacer las necesidades de las familias trabajadoras, podemos asegurar la continua prosperidad de nuestra nación.
Es fácil para los estadounidenses a olvidar que los alimentos que comen no aparece por arte de magia en un estante del supermercado.
Nuestros mayores han trabajado muy duro para mejorar la economía, formar una família y servir a sus comunidades. Ellos merecen vivir una vida independiente y activa en sus años dorados.
Me siento muy orgulloso del hecho de que he vivido en un país de habla española.
Cada estadounidense se merece vivir en libertad, para que su vida privada respetada y la oportunidad de ir tan lejos como su capacidad y esfuerzo se llevará a ellos - sin importar la raza, el género...