A veces sucede así en la vida: cuando son los caballos los que han trabajado, es el cochero el que recibe la propina.
¿Quieres mirarme ahora a los ojos y decirme que me quieres?
Una cosa segura: ya no podremos volver allí. Lo pasado está aún demasiado reciente. Todo lo que hemos procurado olvidar se removería de nuevo, y aquella sensación de miedo, de inquietud furtiva, ...
Las mujeres quieren amor para ser una novela, los hombres una historia corta.
La felicidad no es un bien para ser apreciado, es una cualidad del pensamiento, un estado de la mente.