Trabajar y vivir para servir a los demás, dejar el mundo un poco mejor de como lo encontraste y cosechar para sí mismo tanto tranquilidad como puedas. Esta es la felicidad.
No nos paralizan nuestra capacidad para el bien de melancólico de la capacidad del hombre para el mal.
La voluntad de perseverar es a menudo la diferencia entre el fracaso y el éxito.
La libertad es el oxígeno sin la cual la ciencia no puede respirar.
No podemos desterrar los peligros, pero podemos desterrar temores. No hay que menospreciar la vida de pie en el temor de la muerte.
Odiamos a los que no quieren tomar nuestro consejo, y despreciamos a quienes lo hacen.
El éxito, en un sentido generalmente aceptado del término, significa la oportunidad de experimentar y realizar al máximo las fuerzas que están dentro de nosotros.
Cualquiera sea el curso que ha elegido por sí mismo, no va a ser una tarea, sino una aventura si lleva a un sentido de la gloria de luchar.