Así como un hijo, que es un hijo de hombre, deben ser de la misma naturaleza y el espíritu de su padre, de modo que los hijos de Dios, y así será con todos los que han nacido del Espíritu de Dios...
Y de muchas otras cosas de la misma naturaleza, que estamos tratando de hacer creer estas cosas, y hacemos credos de ellos, y así seguimos haciendo nuestra propia voluntad, que es la base de todo pec...
Pero si continuamos en el pecado, y se rebelan y se endurecen nuestros corazones, nos volvemos tan acostumbrado y se fijaron en él, que sea natural, y vamos a elegir de vez en cuando.