No ignoraba yo el peligro apremiante a que me exponía... me comprometí sin embargo, con votos solemnes, a un estado cuyas reglas creía poder practicar hasta la muerte, independiente de todo humano ...
Que estemos siempre dispuestos a seguir a Cristo aunque nos cueste
Si tú con tal ardor has buscado soledad, retiro, abstracción de criaturas, y si no has soñado más que desiertos, créelo, esta vocación procedía y procede de que tu pobrecita alma conoce, entien...
La voz de Dios no deja vacío alguno en el alma, la llena y no vacila».