El amor verdadero no espera a ser invitado, antes él se invita y se ofrece primero.
Estar en paz consigo mismo es el medio más seguro de comenzar a estarlo con los demás.
¡qué descansada vida la del que huye el mundanal ruido, y sigue la escondida senda por donde han ido los pocos sabios que en el mundo han sido!.
Si hay debajo de la luna cosa que merezca ser estimada y preciada es la mujer buena.
Faltan palabras a la lengua para los sentimientos del alma.
Cualquiera es poderoso para hacer.
Para hacer mal cualquiera es poderoso.
La paz es el blanco a donde enderezan su intento y el bien a que aspiran todas las cosas.
Ninguna cosa siente más el presuntuoso que ser notado de poco avisado.
Los pastores serán brutales mientras las ovejas sean estúpidas
La virtud no teme a la luz, antes desea venir siempre a ella; por es hija de ella, y criada para resplandecer y ser vista.