Frases de Josef Ajram
El objetivo no es ganar sino sentirse bien, tener la disciplina del entrenamiento día a día, estar cómodo contigo mismo.
Podéis tener el mejor producto del mundo, que si nadie lo conoce es como si no lo tuviérais.
¿Quién no es capaz de correr 15 minutos? ¿Quién no es capaz de dividirse los objetivos?
El cronómetro existe pero el reto de verdad es terminar... lo importante es intentarlo hasta el final. Lucha y agota todos tus recursos. La clave está en no rendirse con facilidad.
No cierres nunca los ojos, mira de frente las adversidades.
Nos movemos por la motivación de los objetivos marcados. Marcaros un objetivo.
Hay tres pautas básicas: tomarse en serio las cosas que uno hace, dedicarse en cuerpo y alma a lograr el objetivo que uno se ha impuesto, y convencerse de que lo importante en la vida es terminar lo ...
Da siempre un paso hacia delante cuando lo sientas muy dentro de ti...
Empecé a buscar retos deportivos hasta que uno marcó mi vida: el Ultraman.
Nada llega gratuitamente, todo llega con trabajo... ¡acaba lo que empieces!
Tanto en la vida como en el deporte los límites se los pone uno mismo.
Nunca podrás correr 84km si no empiezas por creer que vas a poder correrlos. Creer en vosotros mismo y tendréis mucho ganado.
Durante la competición aprende a distraer tu mente, márcate objetivos cada 15 minutos.
Aprende y define tu objetivo inmediato, tu primera meta.
El problema del ser humano es que cuando logramos un objetivo, buscamos otro. El ser humano no sabe saborear objetivos.
Avanzar, conseguir lo que te propones... supone esfuerzo. Entrenamiento, sufrimiento... ¿Existe la suerte? No lo sabemos, pero lo que sí sabemos es que todo está en nuestras manos... Un nuevo día,...
No hay nada imposible... ¡vive y actúa con emoción!
El 23 de abril de 2007 perdí 110.000? de mi bolsillo en una operación bursátil.
La palabra fracaso es una palabra que hay que quitarla de nuestro vocabulario.
Cualquier reto deportivo es como la vida: si realmente deseas conseguirlo, la única manera es luchar por ello. Luchar de verdad y no quedarse esperando.