Dios ha hecho el mundo redondo para que nunca podamos ver demasiado lejos el camino.
La cura para todo es siempre agua salada: el sudor, las lágrimas o el mar.
Creo que será verdaderamente glorioso cuando las mujeres sean personas realmente auténticas y tenga todo el mundo abierto a ellas.
Los tiempos difíciles han ayudado a hacerme comprender mejor lo infinitamente rica y maravillosa que es la vida y que muchas cosas que nos preocupan no tienen la más mínima importancia.
Cuando tengas una tarea difícil que hacer, algo que parece imposible, solamente trabaja cada día un poco, todos los días un poco, y de repente verás que el trabajo estará terminado.
En el arte no hay misterio. Haz las cosas que puedas ver, ellas te mostrarán las que no puedes ver.
No creo en el mal, creo solo en el horror. En la naturaleza no existe el mal, solo la abundancia de horror: las plagas, los males, las hormigas y los gusanos.
El hombre alcanza el punto más alto de la amabilidad entre los 12 y los 17, para llegar nuevamente, en una segunda floración, entre los 70 y los 90 años de edad.
Lo mejor de mi naturaleza se revela en el juego, y el juego es sagrado
Los médicos están horrorizados, pero a mí me encanta el champagne y me encantan las ostras y me sientan bien.
Todos los dolores pueden ser sufragados si los ponemos en una historia o contamos una historia sobre ellos.
Yo os diría, ante todo, que debéis ser valientes. Sin valentía no hay forma de vivir. Y si queréis saber algo más, añadiría que es imprescindible poseer el don de amar.
Con el pasado... me encuentro ante un mundo terminado, acabado en todos sus elementos, y por tanto puedo recomponerlo más fácilmente de acuerdo con mi fantasía. Aquí no hay para mí tentación de ...
Nosotras, las mujeres, no somos lo bastante inteligentes para ser escépticas. Así que vivimos, y más intensamente que los hombres, creo yo; tenemos una especie de sentimiento de triunfo simplemente...
Mi amor es a la vez humilde y audaz.
Estar solo es un estado de la mente, algo completamente diferente que la soledad física, cuando los autores contemporáneos se quejan de la insoportable soledad del alma, es solo una prueba de su ins...
África, entre los continentes, les va a enseñar a ustedes que Dios y el Diablo son uno.
En verdad llevamos máscaras según vamos envejeciendo, las máscaras de nuestra edad, y los jóvenes creen que somos como parecemos, lo cual no es el caso.
A lo ancho del mundo ahí va un largo grito desde el corazón del artista: ¡Dejadme esforzarme hasta lo máximo!
Arte real siempre debe suponer cierta brujería.