Frases de maria victoria atencia


10 frases de maria victoria atencia


Ghetto

Denso es el aire aquí. Y tibio. Lo respiro
entre casas que quiebran su fachada en el agua.
Un gato mansamente se me enreda en las piernas
y me retiene inmóvil delante de Yahveh.

De "El cole...

María Victoria Atencia


El Año Que Viene

Para Sharon Keefe Ugalde

Hacer girar el corazón contra su aguja,
contra el tiempo y su sangre, contra la memoria,
desploma mi pared. ¿Seré un rechazo
de piedra más, herida en e...

María Victoria Atencia


Godiva En Blue Jeans

Cuando sobrepasemos la raya que separa
la tarde de la noche, pondremos un caballo
a la puerta del sueño y, tal Lady Godiva,
puesto que así lo quieres, pasearé mi cuerpo
-los p...

María Victoria Atencia


Puerto

Para Biruté Ciplijauskaité

Escucho las campanas del puente de los barcos:
septiembre es mes de tránsito y una goleta viene
a llamarme a las islas, o el cuarto se desplaza
lentamente. ¿Qui...

María Victoria Atencia


Victoria

Estaba abierto el cielo y mi hijo en mis brazos,
tan indefenso y tibio y aterido y fragante
que lo sentí una obra solo mía, victoria
de un cuerpo paso a paso ofrecido a su cuerpo.
Lo envol...

María Victoria Atencia


Marta Y María

Una cosa, amor mío, me será imprescindible
para estar reclinada a tu vera en el suelo:
que mis ojos te miren y tu gracia me llene;
que tu mirada colme mi pecho de ternura
y enajenada...

María Victoria Atencia


Mar

Bajo mi cama estáis, conchas, algas, arenas:
comienza vuestro frío donde acaban mis sábanas.
Rozaría una jábega con descolgar los brazos
y su red tendería del palo de mesana
de este lecho f...

María Victoria Atencia


Los Sábados

Los sábados teníamos de par en par los ojos
enseñando las luces doradas del domingo,
mientras iban las horas resbalando su carga
de ilusión en nosotras.

Sentadas en pupitres, en fil...

María Victoria Atencia


La Rueda

Verdad es que en el mapa figuraba distante,
que una rueda de mi maleta iba gimiendo,
y que en las bocacalles
su cansancio exponían con razón mis tacones.
Signos quizás de pérdida -de la ...

María Victoria Atencia


Amor

Cuando todo se aquieta
en el silencio, vuelvo
al borde de la cuna
en que mi niño duerme
con ojos tan cerrados
que apenas si podría
entrar hasta su sueño
la moneda de un ángel.

Dejados al ab...

María Victoria Atencia