Cuídate de que nadie te odie con razón.
Cuando el mar está en calma todo el mundo puede ser timonel.
El llanto del heredero es una risa enmascarada
Acostumbrarse a la felicidad es una gran infelicidad
Quien no es agradecido perjudica a todos los que necesitan ayuda.
A fuerza de soportar mucho, llegará lo que no pueda soportarse
Incluso a un dios le es difícil amar y ser sabio a la vez.
Dos veces vence el que se vence a sí mismo.
Las cosas valen lo que uno está dispuesto a pagar por ellas.
Un compañero alegre te sirve en el viaje casi de vehículo.
Nada deseamos tanto como aquello que no es consentido.
Es con frecuencia muy sabio olvidar lo que se sabe
En mar tranquila, todos son buenos pilotos
El día que sigue es discípulo del que precede.
Las heridas del amor solo las puede curar quien las causó.
El dinero es tu esclavo si sabes emplearlo; tu amo si no sabes.
La palabra de la ancianidad es muchas veces oráculo.
La herida del amor la sana el mismo que la produce.
Un solo hombre ingrato perjudica a todos los que sufren.
El merito autentico es, pudiendo hacer daño, no hacerlo.