Frases de Robert Louis Stevenson ( 2 )
Enterradme y dejad que descanse bajo el vasto y estrellado cielo. Gozoso viví y gozoso muero.
El matrimonio es como la vida real; un campo de batalla y no un lecho de rosas.
Vale más vivir y morir de una vez, que no languidecer cada día en nuestra habitación bajo el pretexto de preservarnos.
El precio que tenemos que pagar por el dinero se paga en libertad.
Cada hombre tiene su precio.
Observa lo ridículo en todas las cosas.
Toda palabra dicha o escrita es lenguaje muerto.
El desafío publicitario es diferenciarse en la cabeza del chico.
La web, a continuación, o el patrón, una web, una textura elegante y embarazadas vez sensual y lógica: que es el estilo, que es la base del arte de la literatura.
No pido riquezas, ni esperanzas, ni amor, ni un amigo que me comprenda; todo lo que pido es el cielo sobre mí y un camino a mis pies.
No juzgues cada día por lo que cosechas, sino por las semillas que siembras.
El cuerpo es una casa de muchas ventanas: no nos sentamos todos, demostrando a nosotros mismos y llorando en los transeúntes a entrar y nos encanta.
Es mejor perder la salud como un derrochador que perder como un avaro.
Todos los seres humanos están hechos a base de bien y mal.
La dificultad de la literatura no es escribir, sino escribir lo que quieres decir, no afectará a su lector, pero le afecta precisamente a su gusto.
Mientras que amamos, servimos, siempre y cuando somos amados por los demás, he de decir que estamos casi indispensable, y nadie es inútil mientras tenga un amigo.
Una buena vida es aquella inspirada por el amor y guiada por la inteligencia.
En el matrimonio, un hombre se afloja y egoísta, y sufre una degeneración grasa de su ser moral.
Hay una idea en el extranjero entre las personas morales que hagan sus vecinos buena. A una persona que tengo que hacer bueno: yo. Pero mi deber para con mi vecino está mucho más cerca expresado dic...
Si a un hombre le gusta el trabajo de su oficio, al margen de cualquier cuestión de éxito o la fama, los dioses le han llamado.