Frases de Stendhal ( 4 )

Una mujer de cuarenta años de edad, es solo algo que los hombres que han amado a ella en su juventud.

El genio es él y solo él quien encuentra gozo en su arte de ir a trabajar contra viento y marea.

Nuestras verdaderas pasiones son egoístas.

Las mujeres están siempre muy atentas a cualquier emoción.

Todas las religiones se basan en el temor de muchos y la inteligencia de los pocos.

El primer requisito para un historiador es tener la habilidad de no inventar.

Querer es tener el valor de chocar con los obstáculos.

La mojigatería es un tipo de avaricia, el peor de todos.

Matemáticas permite hipócrita y sin ambigüedad.

Cuanto más una carrera se rige por sus pasiones, menos se ha adquirido el hábito de prudente y razonada argumentación, más intenso será su amor por la música.

Es indispensable, para que otros nos soporten a gusto, participar hasta cierto punto en sus pasiones.

Querer, es tener el valor de exponerse a un inconveniente; exponerse así es tentar al acaso y es jugar.

Sobre los rigores de la vida, la amistad es una cantina a cuenta de dulzura.

Los placeres del amor son siempre proporcionales a nuestros miedos.

Si los hombres no fuéramos vanidosos, las mujeres nos lo harían ser.

La última sonrisa del amor, muy frecuentemente, son las lágrimas.

El alma es el conjunto de las pasiones.

La vida es demasiado corta, y el tiempo que perdemos en el bostezo no se puede recuperar.

Poder, después del amor, es la primera fuente de felicidad.

La amistad tiene sus ilusiones ni menos que el amor.